Zinkin Prim en la FNAC de Leganés

14 de Febrero: el día de... el concierto de Zinkin Prim en la FNAC de Leganés.


Reconozco que al principio sentía cierto agobio por el bombardeo promocional que se les estaba haciendo. En tales casos suelo renegar, y cierro mis oídos al grupo que sea: no soporto que intenten manipular mi gusto al estilo de los40, pinchando cada 3 minutos el grupo de turno, a saber por qué publicitarias razones alejadas de lo estrictamente musical.

Pero también admito que, tras esa primera negativa impresión, me relajé y escuché más de una de sus canciones por las ondas radiofónicas que me enganchó.

Así que decidí no faltar a la cita con los Zinkin Prim, para ver qué se contaban en directo, y de paso hacer más de una compra, para qué negarlo.

El concierto ya había empezado cuando llegué. Y pese a tratarse de un sitio más frío que cualquier otro garito del rollo, doy fe de que supieron calentar el ambiente.

Quizá el sonido no fue lo mejor, por cualquier razón que desconozco, pero creo que lo importante de este grupo, por lo que realmente enganchan, es por sus letras. Rock urbano, rock and roll, de barrio, punk rock, como quieras llamarlo. Pero que llegan a la peña porque le cuentan problemas o anécdotas que le podrían pasar a cualquiera.

Aunque no conozco su último disco entero aún, me pareció muy buena su versión cañera de Angelitos Negros de Machín. Para que luego digan que no sabemos apreciar otros estilos. Esto es algo que le gusta mucho hacer a Michel de Stafas.

Se quedaron con el público con la que habla del pibe que está siempre en el bar y su chica al final se intercambia azúcar con el vecino. Que las cosas hay que cuidarlas, está claro.

También me gustó mucho su denuncia en Hacienda.

Y, para terminar, No vas a tener una casa en la puta vida. ¡Qué subidón! "Perdona que te lo diga... No vas a tener una casa en la puta vida". Así acabaron. "Gracias, Barcelona, y viva la República".

Pero el público estaba entregado y pidió otra fervientemente. A decir verdad, una buena parte eran colegas de la banda. Pero está bien, hay que apoyar.

Así que, como remate de la tarde, se marcaron una versión del Vamos muy bien de Obús. Y como ayuda al vocalista, varios fans "escogidos al azar" entre los citados colegas se subieron a hacer coros.

Toda una fiesta, desde luego.